3 Poemas de Jorge Villanueva
CUATRO
SON LOS PUNTOS CARDINALES
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Sed de hombres buenos y verdaderos, hombres de honor y probidad
el
tiempo de vernos detenidos sobre una taza de café
quién
sabe cuándo volvamos y no vuelvan a recordarnos
regresar
a nosotros repasear corriendo deteniendo el tiempo
tirando
las cenizas al viento contemplando sea breve y ligero
que nos acompañe a cargar las penas desnudos pesando ligero
\desplegando las plegarias al viento
llevando
en una sonrisa – un contraste – el equilibrio de sus formas
lo
creí Billy ahora que veo de afuera y estoy de lejos
como
quien guarda algo para el final
hace
suyo el momento y contempla la mirada
cómo lo siento al ver reverdecer en la flor el aliento luchando
\su procreación
hoy te recordaré seré quien contempla un sueño dormido
\que quiere recordar
abrigando
esperanzas cortando pequeños fuegos… encerrando fuegos
al
contemplar en desorden las palabras persiguiendo su estética
deteniendo su belleza reemplazando consolando fuerzas
\que equilibren su desorden
midiendo
establecer un contraste que haga posible equilibrar las palabras
articulando
cuerpos presentes lubricados en lágrimas
en
cajas de cedro pesar la muerte haciendo polvo al viento
cubriendo
nuestras pieles sacando muestras respirando generaciones
vacíos infinitos… se muere incólume para vivir y perdernos en esta fe
\infinita
encumbrando
el horizonte descargarlo de amanecidas…
polvos
de canela al viento
bajo
un sol resplandeciente
sobre
olas veloces mirando al oriente
aires de
respiro y alivio caen
detienen un instante la mirada
El Mundo está lleno de mundos
Carlos López Degregori
Entonces un poema recoge tu rostro
quieto de recuerdo
Palabras dibujan
pálpito de memoria
Y gime
Ya no eres ni estás
Eres la palabra pintando sonidos
Reteniendo cuadros
Comiendo a la intemperie
Desnudo
Con rostro frío sueño
Sumergido en la actividad del agua
Equilibrando la humedad
La sequedad del aire
¿Cómo se siente estar en constante
equilibrio?
Luchando con las formas
Esperar un beso
Y amanecer de golpe
Siendo aquel ente que divaga
las paredes
Abre cortinas y despertares
En una habitación cerrada primitiva
De lenguajes adustos y cortos
De herencias al nacer
De brazos abiertos al caminar
Bajo la lluvia de un cubículo
De hombros manchados
De marcas en cicatrices
Y que dice:
Esconder las puertas
Ser la palabra
Ser la imagen
Ser el poema
El lenguaje y las formas
Y no estar
Ser aquellos en sus jaulas de arena
En sus granos de arena
Mimetizando el equilibrio
Y llorando todas las veces
escondido
Un llanto borrado
De plumas al viento
Y ecuaciones de equilibrio
Rompiendo las olas
Nos comunicamos nos equivocamos
cuando hablamos
En ecuaciones imperfectas
Que solas pueden demostrarse
Si crees en el equilibrio de las olas
Luna/mar/oleaje/simple
Y el tiempo martillando
¡Ahhh! y el tiempo es una orden
de compra
que no llega a tiempo
Se relaja en los sistemas
Se adormece
Mirando tu sexo
Viendo animales sociales
PALE ALE
Se
quedarán las bicicletas en el garaje – ese aire a libertad
El moho y la humedad se harán cargo de ellas
Se borrarán los emblemas en efímeros recuerdos de bar
Imaginando rutas mundos posibles
Sudando las colinas –
cosa que no hicimos
El ciclista tiene la mente en el corazón
Pedalear nos aleja nos permite soñar
¿Te
habrás dado cuenta Luis de Guadalupe
que aquel paisaje tiene el mismo aroma
Impregnado de nosotros de nuestros hijos?
Cuando regresemos se abrirá
lo
cubriremos completo
Mientras exista la memoria podremos contemplar
Ha
de ser verdad –
lo decía mi padre
“un hombre inteligente es aquel que entiende
a los demás”
– si miras de afuera
¿Y si tú eres el centro del universo?
¿Y si amas?
¿Y si amas como si fueras a perderlo todo?
El amor trasciende los silencios – no miente
Es el café
El cigarrillo saborizado con nicotina
La Pale Ale
¿Cómo no amar?
Amar es preparar una Pale Ale
ser
el sabor en los otros
El
tiempo pasa rápido
No se detiene a ver el mundo
Es el pedal de la bicicleta a velocidad constante
Podemos detener el tiempo – si
regresamos
luego de relamer nuestras heridas
Debimos
llegar al mar en bicicleta
Lanzar su sombra por la arena
¿Cuánto de esa sombra quedará en nuestra sombra?
– estamos a tiempo
* Los tres poemas pertenecen al libro Un cuadro al costado de la puerta que pronto saldrá publicado por la editorial Apogeo.
